Globos oculares
Hendiduras palpebrales
Bordes de los párpados
Conjuntiva
Esclerótica
Pupilas
Iris
Inspección
1. Globos oculares: buscar protrusión.
2. Hendiduras palpebrales (aberturas longitudinales entre los párpados): ver anchura y simetría.
3. Bordes de los párpados: buscar descamación, secreción, eritema, posición de las pestañas.
4. Conjuntivas bulbar y palpebral: buscar congestión y color. Conjuntiva bulbar: membrana que recubre la esclerótica (contiene vasos sanguíneos). Conjuntiva palpebral: recubrimiento membranoso del interior de los párpados superior e inferior (contiene vasos sanguíneos).
5. Escleróticas: observar el color: iris, ver el color.
6. Pupilas: observar tamaño, forma, simetría, reacción a la luz y la acomodación (facultad del cristalino para enfocar los objetos a distancias variables).
7. Movimiento ocular: movimientos extraoculares, nistagmo, convergencia.
(Nistagmo: movimiento rápido, lateral, horizontal o giratorio del ojo.)
(Convergencia: capacidad del ojo para voltearse y afocar un objeto muy cercano.)
8. Campos visuales grandes: por confrontación.
9. Agudeza visual
Comprobar con un cartelón de Snellen (con anteojos o sin ellos).
Palpación
1. Estimar la fuerza de los párpados superiores cerrándolos e intentando abrirlos contra resistencia.
2. Palpar los globos oculares a través de los párpados cerrados en busca de hipersensibilidad y tensión.
Exploración del fondo de ojo
(examen final del ojo)
1. Reflejo rojo de la retina: comprobar la resistencia de las cámaras anterior y posterior.
2. Córnea: comprobarla transparencia.
3. Cristalino: comprobarla transparencia.
4. Retina: comprobar color, pigmentación, hemorragias y exudados.
5. Pupila óptica: comprobar color, nitidez de los bordes, pigmentación, grado de elevación, forma en copa.
6. Mácula: véase color. (Se encuentra a un lado de la papila óptica a una distancia equivalente a dos diámetros de la misma.)
7. Vasos sanguíneos: véase diámetro: relación arteriovenosa (A/V); origen y curso; cruzamientos venoarteriales. (Existen arterias y venas, y salen de la papila hacia las regiones nasal y temporal.)
2. Hendiduras palpebrales: son de igual tamaño cuando los ojos están abiertos. Párpado superior: cubre una pequeña porción del iris y la córnea. Párpado inferior: el borde se encuentra abajo de la unión de la córnea y la esclerótica (limbo). Ptosis: caída de los párpados.
3. Bordes de los párpados: están limpios; las aberturas de los conductos lagrimales (puntos) se observan en los extremos nasales de los párpados superior e inferior. Pestañas: Normalmente están distribuidas en forma uniforme y volteadas en dirección hacia afuera.
4. Conjuntiva bulbar (cubre la esclerótica): consiste en vasos sanguíneos rojos, transparentes, que pueden dilatarse y producir el característico ojo "congestionado". Conjuntivas palpebrales: son de color rosa y claras. Conjuntivitis: inflamación de las superficies conjuntivales.
5. Escleróticas: deben ser blancas y claras.
6. Pupilas: normalmente se contraen a medida que aumenta la luz y con la acomodación; son redondas y pueden variar de muy pequeñas ("puntiformes") a grandes (que ocupan todo el espacio del iris).
7. Movimiento extraocular: movimientos de los ojos en forma conjugada. (El movimiento del ojo está controlado por seis músculos.) Normalmente, los ojos se mueven en forma conjugada, excepto cuando convergen sobre un objeto que se mueve muy cerca. Nistagmo: puede observarse normalmente por fatiga del ojo. Convergencia: no se presenta cuando ocurre la visión doble, por lo general de 10 a 15 cm de la nariz.
8. Visión periférica: es completa (en sentidos medial y lateral, superior e inferior) en ambos ojos.
1. Normalmente, quien explora no puede abrir los párpados cuando el paciente los cierra apretados.
2. En estado normal, los globos oculares no son sensibles a la palpación.
1. Reflejo rojo de la retina: puede ser manchado cuando se explora a 30 cm del ojo. Las cámaras anterior y posterior deben ser transparentes.
2. Córnea: debe ser transparente.
3. Cristalino: debe ser transparente (es decir. puede observarse la retina).
4. Retina: su color varía según la cantidad de pigmento presente. No debe haber hemorragias ni exudado.
5. Papila óptica: es circular y de color amarillo rosado. Aunque su aspecto puede variar, normalmente los bordes son precisos y regulares, con cantidades variables de pigmento.
6. Mácula: ya que no contiene vasos sanguíneos, es de color más claro que el resto de la retina.
7. Arterias y venas de la retina: las arterias tienen aproximadamente 4/5 del tamaño de las venas y son de color más claro. En los sitios en que se cruzan las arterias y venas, no suele haber alteraciones en su curso. Puede haber pulsaciones en las venas cerca de la papila óptica.
Uso del Oftalmoscopio
1. El instrumento se sostiene con la mano derecha y se utiliza el ojo derecho para examinar el ojo del mismo lado del paciente.
a) Invertir el procedimiento para examinar el ojo izquierdo.
b) Este método permite acercarse al paciente sin chocar con su nariz.
2. Sostener el aparato de tal forma que los dos últimos dedos estén rectos, en vez de curvos alrededor del mango.
Estos dedos se pueden colocar contra la mejilla del paciente para fijar el aparato y evitar golpearlo.
3. Iniciar la exploración del fondo del ojo a unos 30 cm del paciente. La habitación debe estar oscura.
4. Girar el disco de la cabeza del oftalmoscopio a +8 o + 10 (números negros).
5. Encender la luz del oftalmoscopio y colocar el ocular hasta el ojo de quien explora.
Si el explorador usa anteojos o lentes de contacto, es mejor que los utilice durante la exploración, de manera que no tenga que acomodar su visión al girar el disco del oftalmoscopio.
6. Afocar la luz en la pupila del ojo. Se debe ver de inmediato el reflejo del ojo.
7. Mover lentamente hacia el paciente, observando a través del ocular y conservando la luz dirigida a la pupila, atrás de la cual se encuentra el fondo del ojo.
8. Con el dedo índice de la mano se sostiene el oftalmoscopio, y se gira el disco hacia cero a medida que se acerca.
a) Esto permite enfocar las diversas cámaras del ojo.
b) Una forma de encontrar el ojo y la pupila consiste en colocar la mano en la parte superior de la cabeza del paciente y el pulgar en el ángulo externo del ojo. Si se pierde el fondo, se regresa hasta observar el pulgar y se orienta el aparato moviéndolo hacia adentro.
9. Una vez que la mano descansa en la mejilla del paciente, se sigue girando el disco hasta afocar la retina y los vasos sanguíneos y observar la papila óptica con precisión.
10. Cuando se ha afocado la papila óptica, es posible seguir el trayecto de los vasos sanguíneos hacia arriba, abajo, adentro y afuera.